Catalina, la dama Solitaria

     Ella Vestía de gala, 
     de la noche a la mañana
     quizás era un hada 
     o solo una dama solitaria.

     Un día se me acerco mientras cantaba
     y con una sonrisa encendida
     dejo caer  unas monedas 
     en mi sombrero de Golondrina

     El azar quiso que compartiéramos
     el bus de regreso a casa
     y allí nació nuestra amistad 
     de almas soñadoras y solitarias.

    Cada noche de regreso a casa,
     me contaba sus andanzas;
     y lo que más me enternecía, 
     era que al despedirse,
     siempre me seguía con la mirada, 
     como si quisiera que el bus no se alejara .

     Como suelo hacer al cantar ,
     la invitaba a que bailara
     pero no encontrábamos compañero 
     que se le animara .

     Era hermoso verla llegar 
     con sus vestidos de dama encantada,
     a veces me tiraba un beso 
     que yo atrapaba con la mirada. 

     Su cuerpo ya estaba cansado 
     y hace unos días lo dejo en busca de otros cielos  
     Hoy ya se que donde esté ,me seguirá sonríendo 
     Y yo le seguiré cantando sus Tangos predilectos.
     
     Cada vez que en esa Esquina 
     Suene un Tango bien Porteño
     será para ti Catalina,
     La Dama de los Sueños despiertos …